El Gobierno dio a conocer que entre los encuestados el 49.1% cometió el delito por el cual está detenido bajo los efectos de cualquier sustancia psicoactiva.
Un desalentador panorama fue revelado este jueves del consumo de drogas entre los menores de edad que están en conflicto con la ley.
Un estudio del Ministerio del Interior da cuenta como para poder consumir sustancias psicoativas, los menores han tenido que robar.
De 1.634 menores infractores encuestados, el 49.1% cometió el delito bajo los efectos de cualquier sustancia psicoactiva.
Del total de jóvenes consultados, el 26.8% cometió el delito para comprar estupefacientes.
De los 1.624 menores, que están en edades entre los 14 y 18 años, el 41.2% estaba bajo el efecto de la marihuana; 27.4% bajo el efecto del alcohol; el 26.8% cometió el delito para comprar droga.
El Ministro Fabio Valencia lamentó esa situación y advirtió que muchas veces el inicio de los actos delictivos empieza por el alcohol.
La receta de la vida
Selene Fanjul y Sara Guerrero
Francisco Mora, catedrático de Fisiología Humana en la Facultad de Medicina de la Universidad Complutense de Madrid y catedrático adscrito del Departamento de Fisiología Molecular y Biofísica de la Facultad de Medicina de la Universidad de Iowa en Estados Unidos, además de miembro del Wolfson College de la Universidad de Oxford, considera que se puede retrasar el envejecimiento del cerebro siempre que se adopten ciertos hábitos y estilos de vida que recoge en su libro: “¿Se puede retrasar el envejecimiento del cerebro?”, mediante doce claves.
Comer meno
s de modo alternativo puede llevar a pensar que se requiere pasar hambre, pero lo cierto es que comemos más de lo necesario y vivimos en una sociedad sobrealimentada por excelencia. Además comer menos no implica perder el placer por la comida, al contrario, éste se potencia comiendo menos pero con más gusto. Una dieta equilibrada no sólo nos ayuda a hacer más lento el proceso de envejecimiento sino que también aumenta nuestra esperanza de vida máxima al igual que potencia la producción de neuronas y favorece los mecanismos de reparación de los daños neuronales.
Hacer ejercicio físico de modo regular es una conducta más efectiva para poder mantener la salud de todo el organismo y del cerebro. El declive de las neuronas ocurrido especialmente en personas sedentarias, se retrasa si se practica ejercicio físico continuado. Además el ejercicio físico aumenta la capacidad de reparación del cerebro tras daños producidos por accidentes o enfermedades neurodegenerativas y mejora las enfermedades mentales psiquiátricas como la depresión o la ansiedad además de ayudar a superar situaciones de estrés crónico.
Hacer ejercicio mental todos los días nos ayuda a mantener el cerebro en forma aprendiendo cosas nuevas todos los días y no limitarnos a repetir las ya aprendidas, ya sea leyendo libros, aprendiendo idiomas, tocando un instrumento musical o aprendiendo carpintería, se debe estimular el cerebro para así evitar su deterioro cognitivo.
Viajar mucho en definitiva, quiere decir aprender y memorizar, ya que nos exponemos a estímulos nuevos, a idiomas nuevos, y a memorias y percepciones nuevas, lo que nos ayuda a alcanzar un alto nivel de educación. Viajar significa enfrentarse a lo que no se conoce, y alcanzar, de modo placentero un alto nivel de nueva información y conocimientos que quedan almacenados en la estructura de nuestro cerebro y sirven después como reserva cognitiva.
No vivir sólo y llevar un estilo de vida activo e integrado socialmente mantiene una alta capacidad mental y nos protege contra enfermedades como la demencia o el Alzheimer. Por el contrario, el aislamiento social, reduce las capacidades mentales y acelera el proceso de deterioro además de reducir la esperanza de vida y aumenta la probabilidad de contraer estas enfermedades. El ser humano para una buena salud mental necesita el “calor emocional” de otros, además de su presencia sensorial, física y de comunicación. El aislamiento crónico atrofia neuronas, afecta neuronas del área del cerebro que tienen que ver con el aprendizaje y la memoria, además de otras áreas relacionadas con los procesos mentales, el pensamiento, los sentimientos y la toma de decisiones.
Adaptarse a los cambios sociales significa enfrentarse constantemente a lo nuevo y así lograr el beneficio de aprender y memorizar constantemente. Es una manera de aminorar el estrés que produce el aislamiento y la incomunicación a muchos niveles sociales.
No estrés “con desesperanza”. Los seres humanos vivimos en una sociedad estresada. El estrés produce una gran liberación de hormonas. También aumenta la actividad del corazón y los vasos sanguíneos favorecen, con un mayor flujo sanguíneo, el riesgo del corazón y los músculos; aumenta también el volumen de aire en los pulmones que se suma a toda un a serie de respuestas fisiológicas de todos lo órganos y aparatos de nuestro organismo. El ejercicio físico es una solución que nos ayuda a tratar este estrés crónico.
No fumar, ya que hacerlo conlleva un aumento en el riesgo de padecer cáncer pulmonar, enfermedades cardiovasculares y pulmonares, diabetes, hipertensión, accidentes cerebro-vasculares y muerte prematura. Durante algún tiempo se pensó que el tabaco pudiera ser protector frente a demencias y Alzheimer, pero ahora se sabe que no sólo no nos protege de ellos sino que las potencia.
La esperanza de vida de la población fumadora se ve reducida en 7 años respecto a la media. Otro serio problema añadido al tabaco son los efectos que causa el humo en los no fumadores, que contribuye a empeorar muchas patologías.
Buen sueño con sólo la luz del cielo, ya que la luz artificial puede interferir en los periodos de sueño de una forma determinada. La llamada melatonina, una hormona que se libera en la glándula pineal durante la noche actúa como un poderoso antioxidante en casi todas las células y tejidos del organismo. Esta hormona es muy sensible a la luz, tanto que si una persona despierta en mitad de la noche y hay una luz encendida, esta hormona detiene su secreción, interrumpiéndose así su función reparadora. En resumen, la melatonina nos ayuda a restaurar rápidamente nuestro reloj biológico.
Evitar el apagón emocional. La motivación y la interacción personal son dos factores fundamentales en la vida de las personas ya que todo el mundo necesita un motivo por el que seguir viviendo. Una persona mayor que no tenga ocupaciones, cada vez irá teniendo menos ganas de hacer cosas y tantos sus órganos como sistemas, se irán apagando poco a poco.
Dar sentido a la vida con agradecimiento. Dar y ayudar a los demás nos proporciona una sensación muy placentera que nos ayuda a sentirnos bien con nosotros mismos y con las otras personas, ya que nos hace sentirnos útiles y que podemos proporcionar felicidad a los demás.
Y alcanzar la felicidad de las pequeñas cosas. Es la felicidad que llegamos a alcanzar sin esperar nada a cambio, con cosas tan simples como una sonrisa o la tolerancia.
En definitiva, todas estas claves nos son útiles de maneras diferentes para enlentecer el envejecimiento del cerebro, así como su deterioro. La adopción de éstas como hábitos nuevos también nos protege frente a procesos neurodegenerativos como las demencias, además de contribuir a un alargamiento de la vida misma.
Fuente: “¿Se puede retrasar el envejecimiento del cerebro?”, Francisco Mora
Suscribirse a:
Entradas (Atom)